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29.6.14

Tu puedes....

Pero Tú,tu verdadero tú, eres una parte de la propia divina Llama y Dios q es Todopoderoso habita en ti y por esta razón no existe nada q tú no puedas hacer si de verdad lo quieres.

 J. Krishnamurti.

Guerrero de la Luz...


Hoy he tenido un sueño muy feliz y reconfortante. Me he visto participando en una especial y dura batalla. El sueño comienza al mediodía, en medio de una zona inhóspita y desértica, y con un sol abrasador. La lucha había llegado a su fín. Estaba lleno de sudor y polvo y rodeado de los cuerpos abatidos de ambos bandos, con los signos inequívocos de un encuentro violento.
Me vi tumbado y sin fuerzas, dolorido y cansado por el esfuerzo realizado durante toda la batalla. Me embargaba una gran tristeza al comprobar que habíamos perdido esta contienda a pesar de haber luchado con coraje y con entusiasmo, ilusionados por el triunfo que creíamos tener al alcance de la mano. Apenas si me podía levantar del suelo a pesar de los esfuerzos que hacía para mantenerme en pie.
En medio de la pesadumbre que sentía por este fracaso, vi aparecer ante mí a un Gran Ser de Luz al que no podía ver su rostro por el enorme brillo que desprendía su resplandeciente aura.
Me tendió amorosamente sus manos, ayudándome a incorporarme, y con mucha delicadeza me llevó a la sombra de un frondoso árbol. Estaba tan sorprendido por esta situación que no pude pronunciar ninguna palabra. Este Gran Ser, me miraba fijamente a los ojos, transmitiéndome con su presencia una gran calma y una gran paz, que me llegaba a lo más profundo de mi corazón. Estaba como hipnotizado por esta sensación tan agradable de seguridad y de confianza que me transmitía.
En medio de este estado tan especial de ensimismamiento, este Gran Ser empezó a comunicarse conmigo a través del corazón. Creo que fue ahí, en el corazón, donde notaba y sentía que llegaban como en oleadas todo lo que me estaba transmitiendo.
Todo cuanto sucedió a continuación, ha quedado grabado en mi corazón con caracteres imborrables que no olvidaré mientras viva. Con estas o parecidas palabras (por decirlo de alguna forma) me dijo:
“No te aflijas por esta ni por otras derrotas y fracasos por los que puedas pasar, pues ellos te enseñarán el camino hacia la victoria final. Es de los errores y fracasos y no de los aciertos, donde se aprende el arte de la sagrada lucha, sea cuales sean los contendientes, ya se trate de la materia contra el espíritu, de la oscuridad contra la luz, o del cuerpo contra el alma. Tu triunfo está asegurado si sabes descubrir la forma de combatirlos para acabar para siempre con ellos.
Tienes todo el equipo necesario para ser invencible en la batalla. Ves tu casco polvoriento, con la forma de un ave. Pues si te fijas bien, verás que es la del Ave Fénix, que como sabes, después de cada batalla perdida y consumida por el fuego de cada contienda, renace como el Sol cada mañana, con nuevos ímpetus y con nuevas y renovadas energías para seguir en la lucha por la victoria y triunfo final, sin desánimo ni rencor, con la mirada siempre fija en la meta final. Así te debes comportar tú tras cada fracaso y cada derrota, renovado en todo tu coraje y optimista por saber que la batalla definitiva, la batalla final está al alcance de tu mano, solo depende ti, de tu esfuerzo y de tu voluntad el poder alcanzar esa meta.
Ves esa malla que llevas puesta, que tanto te ha protegido y que ahora está llena de barro, ocultando su intenso brillo y resplandor, pues es tu espíritu inmortal, blanco y radiante como el Sol, ahora oscurecido por las sensaciones y apegos del mundo. Su brillo y resplandor es lo que te ilumina en la acción, en cada momento, en el fragor de la batalla diaria. Esta malla, si la mantienes limpia y aseada te protegerá de cualquier ataque, sea cual sea la naturaleza de tu agresor. Mantenla siempre limpia y así tendrás una insuperable protección que te hará invencible ante cualquier agresión que te venga del exterior.
Ves allí tu escudo, hundido en la arena, apenas visible. Pues si lo observas atentamente comprobarás que tiene la forma de una estrella de cinco puntas el símbolo del hombre perfecto, del guerrero que ha alcanzado la maestría en el arte de la estrategia, del poder y de la gloria en las batallas en las que participa. El enemigo, con sólo ver el valor del guerrero que lleva este escudo y este símbolo, huye desalentado y despavorido, en desbandada, presa del pánico, porque sabe que no puede impedir el sufrir una gran derrota. Aprovecha la virtud y el estado interno que te transmite este escudo para utilizarlo correctamente en cada batalla en la que intervengas.
Ves también la espada que casi no puedes sostener en tus temblorosas manos, pues has de saber que esta espada, está hecha con el más puro acero que haya existido en la tierra. Al guerrero que la empuña con firme carácter, le convierte en un superhombre, en invencible. Ves los dos filos que tiene, si los limpias un poco, verás que de uno de ellos surge una potente energía de luz llena de Bondad y del otro filo surge el resplandor y la energía de la Compasión, ambos filos se unen en la empuñadura que como puedes observar es de un brillante color rosa pastel, que aún ahora y en esta situación tan dramática, mana y brilla con el fulgor del Inmaculado Amor Universal, una Fuerza y un Poder que están más allá de la comprensión y análisis de cualquier persona, que hace del guerrero que es capaz de empuñarla con honor, un Agente de la Luz que elimina la Oscuridad allí donde la esgrime.
Con estas armas es imposible que puedas sentirte indefenso y desamparado, solo te falta adiestrarte con ellas, saber cual tienes que utilizar en cada momento y tener siempre la fe y la certeza de que al final de las muchas batallas perdidas, habrás aprendido la lección que te transformará en un superhombre, en un invencible guerrero curtido en mil batallas y que nada ni nadie te podrá detener en aras de llevar la Luz allí donde sólo hay Oscuridad y Opresión.
Y si aún te quedan dudas, debes saber, que yo estaré siempre a tu lado, alentándote, protegiéndote e inspirándote en los momentos más complicados y difíciles de la misma forma que lo hizo Arjuna con Krihná, como lo describe el Mahabharata.
Animo y no te desalientes, tuya es la victoria y tuya es la corona de oro que adornará tu cabeza por toda la eternidad”.
Con estas amorosas y reconfortantes palabras y con ese estado de ánimo redimido, me desperté feliz y con nuevos bríos, y con renovadas energías de seguir luchando por llegar a convertirme en un invencible Guerrero de la Luz.
Autor: Alfonso del Rosario

30.9.09

el camino del guerrero


1. Carezco de padres: la tierra y el cielo serán mis padres.

2. Carezco de hogar: la conciencia será mi hogar.

3. Carezco de vida y de muerte: el ritmo de la respiración será mi vida y mi muerte.

4. Carezco de fuerza divina: la honradez será mi fuerza divina.

5. Carezco de riqueza: la comprensión será mi riqueza.

6. Carezco de secretos mágicos: el carácter será mi secreto mágico.

7. Carezco de cuerpo: la resistencia será mi cuerpo.

8. Carezco de ojos: el destello del rayo será mi ojo.

9. Carezco de oídos: la sensibilidad será mi oído.

10. Carezco de miembros: la presteza será mi miembro.

11. Carezco de estrategia: la lucidez – lo no oscurecido por el pensamiento- será mi estrategia.

12. Carezco de proyectos: coger la ocasión al vuelo será mi proyecto.

13. Carezco de milagros: la acción correcta será mi milagro.

14. Carezco de principios: la capacidad de adaptación a cualquier circunstancia será mi principio.

15. Carezco de táctica: la vacuidad y la plenitud serán mi táctica.

16. Carezco de talento: la agudeza será mi talento.

17. Carezco de amigos: mi espíritu será mi amigo.

18. Carezco de enemigos: el descuido será mi enemigo.

19. Carezco de armadura: la benevolencia y la virtud serán mi armadura.

20. Carezco de castillo: el espíritu inmutable será mi castillo.

21. Carezco de espada: la ausencia de interés propio será mi espada.

Escrito por un samurai anónimo.

30.7.09

la puerta...


Un guerrero de la luz muchas veces se desanima.

Siente que nada consigue despertar la emoción que deseaba.

Muchas tardes y noches debe permanecer manteniendo una posición conquistada sin que ningún acontecimiento nuevo le devuelva el entusiasmo.

Sus amigos comentan: “Tal vez su lucha haya terminado.”

El guerrero siente dolor y confusión al escuchar estos comentarios porque sabe que aún no llegó hasta donde quería. Pero es obstinado, y no abandona lo que había decidido hacer.

Entonces, cuando menos lo espera, una nueva puerta se abre.

PAULO COELHO

9.7.09

guerrero de la luz...


Desde el momento en que comienza a andar, un guerrero de la luz reconoce el Camino.

Cada piedra, cada curva, le da la bienvenida. El se identifica con las montañas y los arroyos, ve un poco de su alma en las plantas, en los animales y en las aves del campo.

Entonces, aceptando la ayuda de Dios y de las señales de Dios, deja que su Leyenda Personal lo guíe en dirección a las tareas que la vida le reserva.

Algunas noches no tiene donde dormir, otras sufre de insomnio. “Esto forma parte del juego –piensa el guerrero-. Fui yo quien decidió seguir por aquí.”

En esta frase está todo su poder: él escogió la senda por donde camina ahora, y no tiene motivo para protestar.

PAULO COELHO

18.6.09

guerrero de la luz...


El guerrero pocas veces sabe el resultado de una batalla, cuando esta termina.

El movimiento de la lucha generó mucha energía a su alrededor, y existe un momento en el que tanto la victoria como la derrota son posibles. El tiempo dirá quien venció o perdió, pero él sabe que, a partir de ese instante, ya no puede hacer nada más: el destino de aquella lucha está en las manos de Dios.

En esos momentos, el guerrero de la luz no se queda preocupado por los resultados. Examina su corazón y se pregunta: “¿Combatí el buen combate?”. Si la respuesta es positiva, él descansa. Si la respuesta es negativa, toma su espada y empieza a entrenarse de nuevo.

PAULO COELHO

16.6.09

guerrero de la luz...


El guerrero de la luz contempla la vida con dulzura y firmeza.

Está ante un misterio, cuya respuesta encontrará un día. De vez en cuando se dice a sí mismo. “Pero esta vida parece una locura.”

Tiene razón. Entregado al milagro de lo cotidiano, nota que no siempre es capaz de prever las consecuencias de sus actos. A veces actúa sin saber que está actuando, salva sin saber que está salvando, sufre sin saber porqué está triste.

Sí, esta vida es una locura. Pero la gran sabiduría del guerrero de la luz consiste en elegir bien su locura.

PAULO COELHO

26.5.09

la obstinación...

Los valientes siempre son obstinados.

PAULO COELHO

22.5.09

guerrero de la luz


Un guerrero de la luz nunca tiene prisa.

El tiempo trabaja en su favor; él aprende a dominar la impaciencia y evita gestos impensados.

Caminando despacio, nota la firmeza de sus pasos. Sabe que participa de un momento decisivo en la historia de la humanidad, y necesita cambiarse a sí mismo antes de transformar al mundo. Por eso recuerda las palabras de Lanza del Vasto: “Una revolución necesita tiempo para instalarse.”

Un guerrero nunca coge el fruto cuando aún está verde.

PAULO COELHO

14.5.09

guerrero de la luz...

A veces el guerrero de la luz tiene la impresión de vivir dos vidas al mismo tiempo. 

En una de ellas, es obligado a hacer todo lo que no quiere, luchar por ideas en las que no cree. Pero existe otra vida, y él la descubre en sus sueños, lecturas, gente que piensa como él.

El guerrero va permitiendo que sus dos vidas se aproximen. “Hay un puente que une lo que hago con lo que me gustaría hacer”, piensa. Poco a poco, sus sueños van apoderándose de su rutina, hasta que él percibe que está listo para lo que siempre deseó.

Entonces basta un poco de osadía para que ambas vidas se transformen en una sola. 

PAULO COELHO

24.4.09

guerrero de la luz


Entonces lo repito:

Los guerreros de la luz se reconocen por la mirada. Están en el mundo, forman parte del mundo, y al mundo fueron enviados sin alforjas ni sandalias. Muchas veces son cobardes. No siempre actúan acertadamente.

Los guerreros de la luz sufren por tonterías , se preocupan por cosas mezquinas, se juzgan incapaces de crecer. Los guerreros de la luz de vez en cuando se consideran indignos de cualquier bendición o milagro.

Los guerreros de la luz con frecuencia se preguntan que están haciendo aquí. Muchas veces piensan que su vida no tiene sentido.

Por eso son guerreros de la luz. Porque se equivocan. Porque preguntan. Porque continúan buscando un sentido. Y terminan encontrándolo.

PAULO COELHO

20.4.09

guerrero de la luz



El guerrero de la luz está ahora despertando de su sueño.

Piensa: “No sé luchar con esta luz, que me hace crecer”. La luz, sin embargo, no desaparece.

El guerrero piensa: “Necesitaría hacer cambios, pero me falta voluntad para ello.”

La luz continúa, porque la voluntad es una palabra llena de trucos.

Entonces los ojos y el corazón del guerrero empiezan a acostumbrarse a la luz. Ya no lo asusta, y él pasa a aceptar su Leyenda, aún cuando eso signifique correr riesgos.

El guerrero estuvo dormido mucho tiempo. Es natural que se vaya despertando poco a poco.

PAULO COELHO

16.4.09

guerrero de la luz



Escribe otra vez lo que ya te dije:

El guerrero de la luz necesita dedicar tiempo para sí mismo. Y usa ese tiempo para el descanso, la contemplación, el contacto con el Alma del Mundo. Aun en medio del combate, él consigue meditar.

En algunas ocasiones, el guerrero se sienta, se relaja, y deja que todo lo que sucede a su alrededor siga sucediendo. Mira al mundo como si fuera un espectador, no intenta crecer ni disminuir, sólo entregarse sin resistencia al movimiento de la vida.

Lentamente, todo lo que parecía complicado empieza a volverse sencillo. Y el guerrero se alegra.

PAULO COELHO

Vistas de página la semana pasada

Coeur blue

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