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31.7.09

el rabino...


Un hijo del rabino se convirtió al cristianismo y el rabino estaba totalmente perturbado.
El mismo Dios bajó a la tierra a consolarlo. “Después de todo”, dijo el Señor, “¿No ocurrió lo mismo con mi hijo hace dos mil años?

“Si”, replicó el rabino, “pero no olvide, mi hijo era legítimo.”

OSHO

9.7.09

el saludo...


Un hombre corrió excitadamente hacia otro hombre en la calle y dandole cordialmente un cachete en la espalda dijo: “Paul Porter”, le saludó, “¡Qué alegría de verte!. Pero dime, Paul, ¿Qué te ha pasado?. La última vez que te vi, eras bajo y gordo. De pronto apareces alto y delgado.”

“Mire, Señor”, contestó el perplejo hombre, “no soy Paul Porter”.

“Ah” tronó el impavido saludador, despectivamente.

“¿Cambiaste tu nombre también, ¡eh!?”.

OSHO

8.7.09

el granjero...


Un extraño en la zona estaba buscando un determinado lugar. Estaba perdido, se detuvo y preguntó a un viejo granjero por la dirección.

El anciano hombre contestó, “ Ve tres millas al norte, sobre el puente, tuerce a la derecha, sigue seis millas adelante hasta un establo derruido, tuerce a la izquierda en la valla del nogal….no. No llega.”

Lo intentó otra vez, “Sigue esta camino de aquí durante cuatro millas, sobre el riachuelo toma la curva, en el castaño tuerce a la derecha, sigue ese camino durante dos millas, tuerce a la izquierda en la señal de stop…no. Me he equivocado otra vez.”

Intentandolo una vez más el anciano dijo, “Siga hacia la izquierda hasta que choque con la tienda del General Grubber, siga a la derecha cruzando el puente durante cinco millas, tuerza a la derecha en la casa amarilla, pase sobre el cerro hasta que llegue a una bifurcación en el camino, tuerza a la derecha….no. No llega. “

“Entonces”, dijo el anciano granjero después de meditarlo seriamente, “No puede llegar allí desde aquí.”

OSHO

30.6.09

las normas...

Una vez me encontré a Mullá Nasruddin bebiendo en un bar y le pregunté:
-¿Qué estás haciendo, Nasruddin? Ayer me dijiste que habías dejado la bebida y que eras completamente abstemio, ¿Qué estás haciendo?

Nasruddin me contestó:
-Sí, soy totalmente abstemio, pero tampoco soy un fanático.

OSHO

24.6.09

la solidaridad....


Dos hombres estaban sentados en la barra de un bar, cuando uno de ellos resbaló del taburete y se cayó al suelo.

El primero, al ver que el otro no iba a poder volver solo a su casa, decidió ayudarle y buscó la dirección en su cartera. Pasándole un brazo por la cintura, lo levantó y se dirigió con él hacia la puerta. Pero como sus piernas no le sostenían se volvió a caer.

“Vamos, borrachín –exclamó el primero-, ¿por qué diablos no has dejado de beber un poco antes?” El hombre murmuró algo, pero su compañero no estaba de humor para prestarle atención. Sintiéndose más caritativo que la Madre Teresa, se lo cargó a las espaldas y lo llevó a su casa. Llamó a la puerta, indignado. Una mujer le abrió la puerta, entró en la casa y soltó al hombre sobre un sofá.

“Aquí está su marido –le dijo-. Yo, si fuera usted, tendría una charla muy seria con él acerca de la bebida.”

“Le aseguro que lo haré –prometió la señora-. Pero dígame una cosa –le dijo sin dejar de mirar al exterior-, ¿dónde está su silla de ruedas?”

OSHO

17.6.09

la aceptación...


Durante la Segunda Guerra Mundial, un día, un general del ejército británico llama a un soldado raso a su tienda y le dice: “Soldado, ha sido elegido para una misión muy especial. Por la noche saltará en paracaídas a las líneas enemigas, donde le esperará un jeep. El conductor le dará las ordenes”.

Esa noche, el soldado sube al avión. Cuando se están acercando a las líneas enemigas, el soldado pregunta al oficial: “Señor, yo nunca he saltado en paracaídas. ¿Qué tengo que hacer?”.

“No se preocupe –le responde el oficial- . Lo único que tiene que hacer es saltar. Tres segundos más tarde mire hacia arriba y verá como se abre su paracaídas. Si eso no sucede, simplemente tire de la cuerda de emergencia y su segundo paracaídas se abrirá. Cuando aterrice, le estará esperando un jeep para recogerle.”

“De acuerdo”, dice el soldado, y salta del avión. Tres segundos más tarde mira hacia arriba, pero no ocurre nada. De modo que tira de la cuerda de emergencia, pero sigue sin suceder nada. “Dios mío –dice el soldado mientras cae en picado hacia la tierra-. ¡Y seguro que tampoco está ahí el maldito jeep!”.

OSHO

9.6.09

la cultura...



A un pueblerino le invitan a la boda de su primo rico en la capital. En la recepción se siente incomodo con su ropa rural y se pasa la mayor parte del tiempo en un rincón bebiendo whisky. Finalmente, decide unirse a la fiesta , y pide a la dama de aspecto más importante que baile un vals vienés con él. El pueblerino es rechazado airadamente.
“No bailo con usted por cuatro razones. En primer lugar, ha bebido demasiado. En segundo lugar, la orquesta no está tocando un vals. En tercer lugar, no soy una mujer. Y en cuarto lugar, ¡soy el arzobispo de Toledo!

OSHO

la decisión...


Sharon estaba sujetando a Paddy ante el altar el día de su boda cuando el sacerdote anunció que no celebraría la ceremonia mientras Paddy estuviera borracho.
—Llévatelo de aquí y tráelo cuando esté sobrio —le dijo a Sharon.
—Pero, padre, cuando esté sobrio no vendrá —se lamentó Sharon.

OSHO

5.6.09

la paciencia...



Un francés, un judío y un español entraban en prisión con una pena de treinta años. El guardia de la cárcel les dijo que les concedería un deseo a cada uno.
“Una mujer”, pidió el francés.
“Un teléfono”, dijo el judío.
“Un cigarrillo”, dijo el español.
Treinta años después el francés sale con la mujer y diez hijos.
El judío sale con diez mil dolares que ha sacado durante este tiempo en comisiones.
El español sale y dice: “¿Alguien tiene fuego?”.


OSHO


2.6.09

la mente....



Dos chicas estaban hablando en el parque y una de ellas parecía tan sombría, tan triste, que la otra sintió compasión. Puso sus brazos sobre la chaqueta de piel de la bellísima muñeca y dijo, “Angeline, ¿que te preocupa?”

Angeline se encogió de hombros y dijo, “Oh, no es nada supongo, pero quince días atrás el anciano Mr, Short cayó muerto. ¿Le recuerdas?, siempre era tan bueno conmigo. Murió y me dejó cincuenta mil euros. Después, la última semana, el pobre anciano Mr. Pilkinhouse tuvo un ataque al corazón, y murió, y me dejó sesenta mil euros…Y esta semana,... nada de nada.”

OSHO

Traducido por ernesto oso, disculpa cualquier errata.

26.5.09

la crisis...

Era otoño, y los indios de una remota reserva preguntaron a su nuevo jefe si el próximo invierno sería muy frío o apacible. Dado que él era un jefe indio en una sociedad moderna, nunca aprendió los viejos secretos y al mirar el cielo, no podía decir qué iba a suceder con el tiempo.
De cualquier manera, para estar seguro, él respondió a su tribu que el invierno iba a ser verdaderamente frío y que los miembros de la aldea deberían recolectar leña para estar preparados. Pero como también era un líder práctico, después de algunos días tuvo una idea: fue a la cabina telefónica y llamó al Servicio Nacional de Meteorología y preguntó:
- ¿El próximo invierno será muy frío?
- Parece que sí será bastante frío.
El jefe volvió a su gente y les dijo que se pusieran a juntar más leña aún, para estar preparados. Una semana después el jefe llamó otra vez al Servicio Nacional de Meteorología: - ¿Será un invierno muy frío? - Sí, muy frío.
El jefe regresó con su gente y les ordenó recolectar todo los pedazos de leña que pudieran encontrar. Dos semanas más tarde llamó al Servicio Nacional de Meteorología una vez más:
- ¿Están absolutamente seguros de que el próximo invierno será muy frío?
- Absolutamente. Sin duda alguna, va a estar de quedarse helados. Va a ser uno de los inviernos más fríos que se hayan conocido.
- Pero, ¿cómo pueden estar tan seguros?
- ¡Porque los pinches indios andan como locos juntando leña!

ANÓNIMO

7.2.09

el cura...

Una señora de unos cuarenta años, su hija de unos veinte años, un cura y un soldado viajaban en el mismo compartimento del tren.

Al pasar por un túnel, en la oscuridad, se oyó un beso y una bofetada.

Cuando el tren salió del túnel, la madre pensó: “el soldado debe de haberle dado un beso a la niña y, como es tan recatada, le ha dado un bofetón”.

La hija pensó:”El cura o el soldado debe de haberle dado un beso a mi madre, que todavía está de muy buen ver, y le ha dado un bofetón”.

El cura pensó: “El soldado debe de haberle dado un beso a la madre o a la hija, estas se han debido de equivocar, y vaya bofetón que me he llevado”.

Y el soldado pensó:”En el próximo túnel me vuelvo a besar la mano y le suelto otra ostia al cura”.

OSHO

21.1.09

el dia despues...


Todo el mundo, tal como es, es necesario; y es necesario “tal y como es”, por eso naces de determinada forma.

No pretendas extraviarte de tu naturaleza.

OSHO


Una pequeña partícula de arena en los ojos puede impedirte ver todo el cielo.

BUDA


La puerta se abrirá; no hay ningún misterio. Es simple aritmética. No estoy hablando de la aritmética que has estudiado, sino de la aritmética del mundo espiritual, y aquellos que no lo han conocido, los que no han sentido su fragancia son verdaderamente pobres.

OSHO


Un profesor de psicología, en una clase, dice a sus alumnos que va a llevar a cabo un estudio sobre el sexo. Les dice: “Los que tengan sexo una vez al día, que levanten la mano”.

Levantaron la mano en torno a un quince por ciento de los alumnos. “Muy bien-continúa-, los que tengan sexo tres veces por semana, que levanten la mano.”

En esa ocasión , levantaron la mano en torno a un cuarenta por ciento.

“Interesante-dice-. Los que tengan sexo una vez por semana que levanten la mano.”

Lo hizo alrededor del veinte por ciento.

Entonces, el profesor preguntó: “ Los que tengan sexo una vez al mes que levanten la mano”.

Surgieron unas pocas manos. Por último, preguntó: “Los que tengan sexo una vez al año que levanten la mano”.

Un pequeño muchacho empezó a mover ostensiblemente el brazo, con una sonrisa de oreja a oreja.

“¿Por qué estás tan contento?, le preguntó el profesor.

El pequeño muchacho saltó de su pupitre y se puso a bailar y a cantar de alegría.
”¡ Porque es esta noche! “.


OSHO

No sirve de mucho decir que quieres algo, y luego, “por si acaso”, prepararte para pasar sin ello .

Quema las naves.

MIKE DOOLEY


Ningún milagro ocurre alguna vez a menos que tú lo hagas ocurrir.

OSHO


Ama y haz lo que quieras. Si callas, callarás con amor; si gritas, gritarás con amor; si corriges, corregirás con amor, si perdonas, perdonarás con amor.

SAN AGUSTÍN


Jaimito va al dentista para una revisión. “Está bien , doctor-le dice al galeno-. Se puede quitar la mascara, le he reconocido.”

OSHO





14.12.08

en fin....


El camino es muy sencillo.

El camino consiste en salir de la mente tantas veces al día como te sea posible.

Siempre que tengas tiempo, sal de la mente.

Unas cuantas cosas pueden ayudarte.

Si no puedes estar sentado en silencio sin más, si sientes que tienes demasiada energía para hacer algo y no lo haces, entonces, toda esa energía se transforma en un juego de la mente, te será más fácil empezar con algo creativo.

Si te gusta la música, escucha música; sumérgete en ella.

Si amas el baile, baila; permítete desaparecer en el baile.

O cualquier otra cosa; si sabes cerámica, haz vasijas hermosas, poniendo en ello toda tu energía. Cuando pones toda tu energía en algo, la mente no recibe ninguna energía y se vuelve silenciosa por voluntad propia.

OSHO


Un domingo por la tarde el Papa estaba haciendo un crucigrama.

Perplejo, levanta la cabeza, se rasca la frente y le pregunta a uno de los cardenales:

“¿Se te ocurre una palabra de cuatro letras que acabe en o-ñ-o referido a las mujeres?”

“Moño”, replica el cardenal.

“Ah, gracias-le dice el Papa-.¿Tienes una goma de borrar?”.

OSHO


No hay ninguna necesidad de saber hacia dónde estás yendo.

No hay ninguna necesidad de saber por qué estás yendo.

Todo lo que necesitas saber es si vas disfrutando, porque cuando se va gozando no se puede estar equivocado.

OSHO


Un borracho salió tambaleándose de la taberna y empezó a andar con un pie sobre el asfalto y el otro sobre el bordillo. Después de caminar un corto trecho un policía se fijó en él.-Oiga-dijo el policía-,¡usted está borracho!
-¡Dios!-exclamó con gran alivio-¿Es eso lo que pasa? ¡Pensaba que me había quedado cojo!

OSHO


Cada individuo tiene que explorar a su propia manera.

No existe una superautopista con hitos que indiquen cuánto falta para llegar a la meta.

En la exploración espiritual, tienes que caminar y crear tu camino andando; no hay un camino ya marcado que uno pueda simplemente seguir.

OSHO



A un misionero católico le destinaron a un lugar remoto en el Artico.

A los pocos meses, vino a visitarle un obispo.

El obispo le preguntó: “¿Cómo te sientes rodeado de hielo y osos polares?”.

El misionero le contestó:” Bien, los esquimales son gente muy amistosa”.

“¿Y qué te parece el clima?”, volvió a preguntar el obispo.

“Bueno –contestó el misionero-, mientras tenga mi rosario y mi whisky, el clima no me preocupa.”

“Me alegra oírte decir eso –le dijo el obispo-. Y hablando de whisky, ¿Qué te parece si echamos un par de tragos?”

“¡Buena idea! – dijo el padre-. ¡Rosario! ¿Puedes traernos el whisky?”.

OSHO


El nuevo sannyasin sólo puede existir si es creativo.

OSHO


Jaimito está jugando con su tren eléctrico en el salón mientras su madre está preparando la cena.

Cuando el tren ha dado diez vueltas, lo para y dice: “¡ Todos los cabrones que quieran subir, que suban, y todos los cabrones que quieran bajar, que bajen!”.

Deja que el tren vuelva a dar otras diez vueltas y repite la misma frase.

Entonces la madre entra muy enfadada en el salón y castiga a Jaimito a quedarse en un rincón por decir palabrotas.

A la media hora, su madre le dice que puede volver a jugar con el tren. Jaimito deja que el tren dé diez vueltas, lo para y dice: “¡Todos los cabrones que quieran subir, que suban!¡Todos los cabrones que quieran bajar, que bajen! ¡Y si alguien tiene alguna queja por el retraso, que hable con la zorra de la cocina!”.

OSHO

27.11.08

un chiste....

Un pordiosero sucio, desaliñado y sin afeitar, con los ojos enrojecidos y desdentado, pidió limosna a un hombre.

El señor le preguntó: “¿Bebes, fumas o juegas?”

“Señor -dijo el vagabundo-, no pruebo el alcohol, el tabaco me resulta asqueroso, y no quiero saber nada del juego.”

“De acuerdo –dijo-, si te vienes a casa te daré cinco euros.”

Al entrar en casa, su mujer apartó a su marido y le dijo al oído:

“¿Cómo se te ocurre traerte a un elemento con esa pinta a casa?”.

“Cariño -le tranquilizó-, sólo quería que vieras el aspecto que tiene una persona que no bebe, ni fuma, ni juega.”

OSHO

Vistas de página la semana pasada

Coeur blue

Coeur blue
Only losers can win in this game